En Algo más que una bonita voz, Lorraine Murray teje una narrativa vibrante donde Jess Connelly se encara a un festival en las islas Hébridas que se transforma en el ámbito idóneo para su desarrollo personal. Su conexión con Rod lúcida conmuevas profundas que redefinen los límites del amor y la música, marcando el comienzo de un viaje de autodescubrimiento inolvidable.