En Una historia ridícula, Luis Landero nos sumerge en un relato donde el humor se entrelaza con profundas medites sobre el cariño. La historia prosigue a Marcial, un autodidacta con pasión, y a Pepita, una mujer de delicada cultura, en una secuencia de encuentros y desencuentros que revelan los contrastes entre un planeta diario y otro lleno de refinamiento.